Primero fue Melissa Bachman quien se convirtió en objeto de odio por haber matado leones en Sudáfrica.
Y ahora es el turno de Kendall Jones:
Y todo el mundo está enojado con Jones, al igual que lo estaban con Bachman, y le lanzan toda clase de insultos y de apelativos misóginos, en ocasiones explícitamente violentos.
Ésta es la cuestión: ¿Qué diferencia hay entre estas mujeres y cualquier otro que no sea vegano?
La respuesta: No hay diferencia.
Así que esta clase de eventos deberían ayudar a cualquiera que preste atención a reconocer que el especismo y el sexismo están profundamente entrelazados.
Ésta es la cuestión: ¿Qué diferencia hay entre estas mujeres y cualquier otro que no sea vegano?
La respuesta: No hay diferencia.
Así que esta clase de eventos deberían ayudar a cualquiera que preste atención a reconocer que el especismo y el sexismo están profundamente entrelazados.